Estas son palabras de
Cecilia Castro, enfermera, ex trabajadora del ministerio de Salud en el
programa de abordaje territorial en prevención de epidemias.
Por Fernando Matías
La historia de Cecilia no es
la de ella sola, sino que también es la suerte por la que también atraviesan
miles de trabajadores del Estado Argentino, desde la asunción del presidente
Mauricio Macri.
Es inevitable ver en el
rostro de esta trabajadora de la Salud y en su voz quebrantada lo que le generó
su despido y el cierre del programa de abordaje territorial, que ya no se
realizara en zonas de alta vulnerabilidad. Es en éste contexto que Cecilia
afirma: “El dolor más grande, es que ante cada despido de un trabajador, es un
derecho recortado a aquellos que más lo necesitan, por que terminan con ese
tejido social del abordaje, donde el trabajador en nombre del Estado, es quien
acerca los derechos a todos los sectores”.
Cecilia describe cómo eran
sus días en el Estado: “Un día en mi vida era despertar en distintos puntos del
país, un día en Misiones, otro en Chaco, otro en el conurbano bonaerense. Llegaba
con el camión hospital donde contábamos con la sala y los insumos para
trabajar, atendíamos a 500 personas por día que llegaban desde distintos puntos
de las provincias para hacerse atender", expresó.
Luego, agregó: "Mi función era la aplicación de vacunas de calendario obligatorio a niños y niñas de todo el país, a la vez que también, debido a lo postergado que se encontraban algunos lugares, hacíamos con los demás colegas de contenedores, de psicólogos y hasta de responsables de ese deterioro que sufre la salud en las provincia y de porque tardamos tanto en llegar”.
Luego, agregó: "Mi función era la aplicación de vacunas de calendario obligatorio a niños y niñas de todo el país, a la vez que también, debido a lo postergado que se encontraban algunos lugares, hacíamos con los demás colegas de contenedores, de psicólogos y hasta de responsables de ese deterioro que sufre la salud en las provincia y de porque tardamos tanto en llegar”.
Cecilia Castro además de ser
enfermera, es trabajadora social, trabajó durante diez años en el ministerio de
Salud y hace tres meses había logrado acceder a la planta permanente del Estado
Nacional mediante concurso público. Al recibir el telegrama de despido se
terminaron todos los proyectos que tenía en cuanto al desarrollo y el
crecimiento laboral y personal.
Publicar un comentario