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El Sistema Educativo en Honduras atraviesa una dura y crítica situación, posicionándose junto con El Salvador y Guatemala, con un nivel de cobertura educativa universitaria de 30%, teniendo el menor número de universidades en Centroamérica, según datos la Dirección de Educación Superior en Honduras (DES). 

Foto: Honduras Tierra Libre

por Keylin Lineth Espinoza Vásquez (*)

Asimismo los datos publicados en mayo de 2010, por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), denotan que de la población de aproximadamente 2,633,967 adolescentes y jóvenes, solo el 79.5% estudia lo que equivale a 2, 095,409, de los cuales el 5.9 además de estudiar debe trabajar. 

En tanto que las cifras del año 2010, del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), indican que la tasa de matrícula en el nivel primario es de 96.6%; para el ciclo común y diversificado, el 39.5% y el 27.6% respectivamente, mientras que solo el 17% a nivel de educación superior. 

Lo que desemboca en un 14.5 % el analfabetismo, de los cuales 21.5% en la población del área rural, frente a un 7.5% en la urbana, según cifras del INE para mayo del 2013, cifras que denotan que la educación no ha seguido el ritmo de crecimiento de la población. 

Los problemas educativos radican en que muchos jóvenes se conviertan en “ninis”, y es que "En el año 2008, el 25.4 por ciento, es decir más de 750 mil jóvenes hondureños, manifestaron no estar estudiando ni trabajando", indicó un Informe sobre Desarrollo Humano Honduras 2008/2009 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud). 

La baja tasa de estudiantes, por un lado se debe a los pocos centros educativos públicos que hay a nivel nacional, ya que hay lugares recónditos en donde no hay centros educativos; sumándole a esto que el Estado poco o nada se preocupa por construir nuevos centros. 

Lo que ubica a Honduras con un promedio de escolaridad de 7 años, que en comparación con Costa Rica “la nación centroamericana más sobresaliente”, que tiene un promedio de 10 ; con 3 menos. 

Asimismo la pobreza extrema, en que vive gran porcentaje de los hondureños, impide el poder asistir a la universidad, si es que se pudo terminar la secundaria. La universidad se convierte así, en un privilegio del que muy pocos pueden gozar, ya que actualmente solo el 1% de los 8 millones de hondureños, pueden cursar una carrera universitaria. 

También se suma a los problemas educativos, el desacuerdo entre el gobierno y los docentes; que desemboca en una baja calidad de educación y en el incumplimiento de los 200 días de clase, trato que hay entre el gobierno, docentes y padres de familia 

Motivo por el cual el Consejo de Educación Superior de Honduras (CES) aprobó el Anteproyecto Plan de desarrollo estratégico del sistema de educación superior en Honduras 2014-2023, con el cual pretende trabajar en reformas para mejorar la educación y elevar la calidad de educación. 

 Las reformas propuestas buscan ampliar la cobertura educativa a nivel nacional, así como ampliar la oferta educativa existente, promoviendo un equilibrio de acuerdo a las necesidades del país, y a las áreas de las cuales se puede sacar mejor provecho como el área agrícola, principalmente. 

Además se ampliará la oferta actual de maestrías de un 23 % a un mínimo del 30% en el 2022 y los doctorados de un 1.3% a un mínimo del 10% del total de la oferta educativa a nivel de educación superior. Sin embargo por ahora el futuro educativo no está asegurado, puesto que en los próximos años se estima que la situación seguirá igual y solo hasta el 2023 se pondrán ver resultados convincentes para la ciudadanía. Keylin Lineth Espinoza Vásquez Tercer Año de Periodismo Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH)

(*) Corresponsal de Honduras 

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