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Los integrantes de la ''Representación Estudiantil Universitaria'' (REU) decidieron ausentarse a las dos asambleas consecutivas que se realizaron esta semana en la sede España de la UNDAV. El panorama aguarda expectante un nuevo accionar con posiciones cada vez más marcadas. 



Por Micaela D. Russo 



La asamblea de estudiantes se realizó por quinta vez este miércoles 17 de junio, en esta oportunidad en la sede central de la Universidad Nacional de Avellaneda, donde no tuvo participación de los miembros de la Lista N° 2 ''REU'', que trajo como consecuencia la imposibilidad de escuchar los argumentos que los llevaron a accionar judicialmente contra la decisión de la Junta Electoral.  

La determinación del REU, quién se mostró ¨a favor de la comunidad educativa¨, no fue sometida a una votación que se aprobara frente al estudiantado,  ¨ni agotaron todas las instancias institucionales que requería el caso¨, según informaron integrantes de la lista oficial. 

La medida opositora fue apelar  al juez federal de Quilmes, Luis Armella, apartado de la causa 'Mendoza' por ''irregularidades'' comprobadas por la Auditoría General del Nación.   


Tal como denunció Página 12 en su publicación del lunes 5 de noviembre de 2012, el Gobierno solicitó al Consejo de la Magistratura que impulse el juicio político contra Armella, quien fue designado por la Corte Suprema de Justicia en julio de 2008 como responsable de las obras de saneamiento de la Cuenca Matanza Riachuelo y resultó acusado por "mal desempeño de sus funciones". 

Estas cuestiones se desencadenaron a partir de una serie de actos irregulares durante las elecciones del Consejo Superior Estudiantil, que se llevaron a cabo el 13 y 14 de mayo pasados. Uno de ellos lo cometió la representante de los estudiantes dentro de la Junta Electoral e integrante de la Lista N° 2, Mónica Linares, quien fue acusada de repartir boletas de su agrupación durante la votación en las filas de los comicios de las mesas 6 y 7 de la sede Piñeyro.   

Por otra parte y continuando en las mismas instalaciones, durante el escrutinio se labró un acta con el conteo de diez sobres en blanco de la mesa 3. Ello coincidió con la cantidad de boletas que se encontraron luego debajo de la mesa 4, las cuales pertenecían a la Lista N° 1 ''Azul y Blanca''.  


Finalmente, en la misma sede, al llegar a la mesa N° 10  de Turismo y Deportes se contabilizaron 169 votos, de los cuales 40 carecían de la firma de su respectivo presidente de mesa en los sobres y otras se encontraban sin el sello autorizado. Por esto, la Junta Electoral decidió entrar en cuarto intermedio y frenar el conteo. Si bien ninguno de esos sobres fue abierto hasta el día de hoy, la urna quedó resguardada y a cargo de los responsables correspondientes. 
Ante esta situación, la Lista ''Azul y Blanca'' presentó la impugnación de toda la elección y la expulsión de Mónica Linares como miembro de la Junta Electoral debido a su accionar, mientras que los miembros del REU reclamaron el conteo de esos votos.    
La elección quedó suspendida, no hay representantes del Consejo Superior Estudiantil y la comunidad educativa sigue a la espera de una resolución correspondiente y autónoma de la universidad. Lo que las asambleas plantearon fue la posibilidad de escuchar diferentes testimonios que se pusieron en común para afrontar la actual situación, además de integrar a la gran mayoría de los estudiantes que se acercaron voluntariamente para informarse, ponerse en tema y debatir qué tipo de universidad se quiere. 


  



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