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El Director Decano de Periodismo de la UNDAV Daniel Escribano repasa en una entrevista el rol de la profesión y su historia de vida.  

En su oficina de la UNDAV

Conseguir una entrevista con el decano del Departamento de Comunicación y Tecnologías de la Información, no parecía un trabajo fácil. A uno se le ocurre que una persona ocupando semejante puesto estaría llena de ocupaciones y sin mucho tiempo para dedicarles a unos estudiantes de primer año. Por eso al golpear la puerta de su oficina, un tanto resignados y con algo de timidez, nos sorprendimos con un  “pasen en 15 minutos”.

En la oficina no paraba de sonar el teléfono, pero se preocupó por contestar las preguntas y seguir en sintonía con la entrevista. Daniel Escribano, oriundo de Avellaneda, hincha de la academia, cuenta en esta entrevista, como un estudiante de periodismo de la Universidad de Lomas llegó sin proponérselo a ser Decano en la UNDAV.

Adelanta los proyectos relacionados con la Universidad, y opina sobre el rol del periodista en la actualidad, Lanata, Victor Hugo, y la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.

-¿Cómo fueron sus inicios?

-Nací en Avellaneda y soy Licenciado en Periodismo, me recibí  en  la Universidad Nacional  de Lomas de Zamora en 1986, en ese entonces era una de las pocas instituciones  donde se podía estudiar periodismo, la otra alternativa era la Universidad de La  Plata, pero opté por una cuestión de cercanía.

-¿En qué momento se dio cuenta  que su vida iba a  relacionar  con la comunicación y el periodismo?

-Creo que me di cuenta en los primeros meses de cursada, porque no estaba muy convencido de que esa fuera mi carrera. De todas maneras, hubieron cosas que me indicaron que era mi profesión, por ejemplo en la secundaria (ENSPA)  era el único que iba con el diario abajo del brazo todos los días, armaba las carteleras, representaba a los estudiantes, hablaba, organizaba, y bueno, a la hora de definir una carrera, yo había decidido que iba a estudiar algo vinculado con la comunicación, y así fue que decidí anotarme en  el curso de ingreso de la escuela de náutica.

-¿Náutica?

-Claro,  en el área de comunicación de la náutica, que está relacionada con los barcos, la navegación, y todo eso, hasta que un día me pregunté “¿Qué hago acá? Esto no me gusta”. Después varios amigos míos me aconsejaron estudiar periodismo. Un poco llevado por esos comentarios, me anote en Lomas de Zamora, y al cursar algunas materias, me dije “si, definitivamente esto es lo mío”

-¿Y qué es lo que más recuerda  en su  paso por la universidad?

-Los amigos que hice en el camino, muchos son hoy profesores acá en la UNDAV, y  algunos son padrinos de mis hijos. Me hice amigo de muchas personas que hoy son conocidas, como Gustavo Cordera, Gabriel Mariotto, cursábamos juntos. Una persona  que me marcó mucho de la Universidad, fue el profesor Zukernik, que trabajaba en el diario Clarín,  nos hacía llevar las máquinas de escribir y nos mandaba a buscar notas a todos lados.

En el primer acto de colación de la UNDAV

-Difícil imaginar un mundo sin computadoras e internet, ¿no?

(Ríe) Si, es difícil, siento que te hablo de la prehistoria, las máquinas eran portátiles y las llevábamos a la Universidad. Desde allí  nos mandaba  a la policía, a los bomberos, a donde sea a buscar notas. Después teníamos que volver y editarlas.

-¿Cuál fue tu primera experiencia laboral?

-Fue una experiencia bastante traumática, trabajando para el diario Popular, tuve que cubrir un partido de fútbol, del Porvenir  contra Ferro. Era toda una experiencia, porque tenía que cubrir el partido y llamar por teléfono público  a la redacción para pasar los datos. Y cuando llegaba, recién ahí hacia el comentario, pero si no llegaba al cierre, tenía que mandar las formaciones y los resultados. Era todo nuevo, llegar a la redacción por primera vez, familiarizarme con las máquinas de escribir que no conocía, todo un desafío, y de a poquito me fui formando.

Siempre emparento al periodismo con un oficio, porque por ejemplo el panadero, sabe cuándo empieza a trabajar como se hace el pan, pero al hacerlo todos los días, va viendo como regular la temperatura del horno, si tiene que poner más o menos levadura, hasta que encuentra el punto justo, y después le sale mecánicamente. Con el periodismo pasa lo mismo, al principio te cuesta escribir, redactar las notas, por ahí no te convence mucho lo que haces, pero con el tiempo vas adquiriendo habilidades, y va saliendo solo el producto, obviamente también está la cuota de talento y creatividad de cada uno que le da un plus. Pero es un oficio, al que hay que regar como una plantita todos los días, capacitándose, leyendo, estando informando,  estudiando…

-¿Qué otra cosa le hubiera gustado estudiar además de la comunicación?

-No cabe duda que algo que tenga que ver con el turismo. Me apasiona el tema de organizar viajes, circuitos turísticos, y todo eso. Ahora me dedico al periodismo, pero lo aplico como un hobby.

-¿Tuvo alguna influencia de  algún periodistas que le sirvió como ejemplo a seguir?

-No. Por suerte desde un primer momento tuve la posibilidad de acceder a varios medios de comunicación. Mis primeros trabajos tienen que ver con diarios que no son los tradicionales y que estaban   emparentados con otro pensamiento ideológico (La voz, Popular).

Algunos me decepcionaron, otros no, pero no tengo referentes. En su momento me apasionaba lo que hacía Lanata, después conociéndolo, me decepcionó. Él trabajó con muchos amigos míos, que contaban que era poco solidario con sus compañeros, eso te decepciona. Otro que me apasiona es Víctor Hugo (Morales), el hace un periodismo nómade, y en eso me parezco a él, eso de ir viajando, estar de un lado para el otro.


Junto a periodistas deportivos, esta semana

“Sin dudas es el mejor momento de mi carrera”

Así lo expresa Escribano, socio de Racing y parte de una empresa de comunicación, dedicada a hacer servicios para empresas, instituciones, sindicatos hace veinte años.  

A los 51 años cree que su recorrido es muy positivo. “Todo cuesta, porque cuanto más alto llega uno en una escala jerárquica, mas desafíos tenés”, expresa.

-¿Cuál es su  rol concreto dentro de la UNDAV?

-Yo soy Director Decano del Departamento de Comunicación y Tecnologías de la información. Soy coordinador de la carrera de Periodismo y también soy Consejero departamental. Participo representando a los docentes (lista azul). También represento a la UNDAV en distintas redes, como la red de carreras de la comunicación de todo el país (REDCOM), allí  integro la comisión directiva, y la RENAU, red nacional audiovisual, representando a la UNDAV. De vez en cuando duermo y voy a la cancha (risas).

-Y en su rol de Decano, usted cumple un papel importante en nuestra formación como periodistas.

-No cabe duda que es una responsabilidad importantísima. Hace poco tuvimos la primera colación de grado, entregamos los primeros títulos, y fue un  evento muy lindo. Ves a los chicos que hace tres años atrás les diste la bienvenida y  ahora le estas entregando un título. Verlos bien formados, capacitados, trabajando, es una gran satisfacción.

-¿Cómo llegó a la UNDAV?

-Llegué por un llamado del actual Rector, el Ingeniero Jorge Calzoni, quien  me pidió asesoramiento. Yo venía con experiencia como docente en La Matanza, y en Lomas. Fui diez años profesor y director de la carrera de periodismo de la Universidad Abierta Interamericana (UAI). Por estos antecedentes,  me llamo desinteresadamente para pedirme mi opinión. En un momento me pidió una mano pero con otro compromiso, como director de la cátedra, acepté y cinco años después tenemos tres carreras; licenciatura, tecnicatura y ciclo complementario, con más de 1200 alumnos estudiando periodismo.

-Se nota el crecimiento de la carrera

-Lo bueno es el programa, las herramientas, en primer año los estudiantes ya tienen la posibilidad de  hacer radio, en segundo televisión. Esto no es habitual en otras universidades.

-¿Cómo ve la evolución de la universidad, en estos años?

-La evolución es positiva, el crecimiento es notable. Como toda universidad nueva, se aprende sobre la marcha, pero la gran mayoría de las cosas se hacen muy bien. Que cada vez más jóvenes  la elijan,  es el primer diagnóstico de una evolución positiva. Creo que vamos por buen camino.

-¿Qué diferencia la UNDAV de otras universidades?

-Es una buena pregunta, pero incómoda. Porque tengo que hablar mal de otras universidades y no lo voy hacer. Te voy a decir que la UNDAV tiene cosas originales, como por ejemplo la materia trabajo social comunitario, que es muy innovadora. La carrera de periodismo da respuestas inmediatas a lo que el alumno viene a buscar: las herramientas y la capacidad de manejarlas, ser periodistas y salir al mercado con una posibilidad potencial de encontrar un trabajo. 

Veo el sistema universitario muy bien, no solo a la UNDAV, además hay relación con otras universidades, trabajamos en conjunto, que es muy positivo. Dentro de poco viajo a Córdoba, invitado por la Universidad de Córdoba, a un congreso de comunicación y después en ésta universidad, en julio, tendremos reunión de cátedras de periodismo de investigación en la que vendrán muchas universidades de todo el país. Cada universidad tiene su elemento distintivo.



En Bolivia, en un encuentro de extensión universitaria

-¿Hay proyectos relacionados con el departamento?

-Muchos, por ejemplo  a partir del segundo  cuatrimestre, los alumnos que tengan más del 50 % de materias aprobadas de la carrera, van a tener la posibilidad de participar en el sistema de prácticas pre-profesionales, es decir que trabajarán un cuatrimestre en algún medio de comunicación con los que tenemos convenios. También estamos poniendo en marcha proyectos de movilidad, para  que los estudiantes puedan ir a estudiar a otras universidades de la Argentina. 

El mes que viene viajan cuatro estudiantes; dos a Salta, uno a Córdoba y otros a Rosario, estudiarán periodismo en esas universidades por un cuatrimestre. También estuvimos en Sucre, y estamos desarrollando proyectos para que vengan estudiantes de allá a estudiar a la UNDAV.

-Saliendo un poco de la universidad y metiéndonos en uno de los debates que tiene hoy la sociedad con respecto al rol que cumplen  los medios y periodistas. ¿Cuál cree que debería ser el rol del periodista en la sociedad?

-El rol del periodista, uno no lo puede dictaminar. En este momento hay una posibilidad muy concreta de salida laboral, uno puede  trabajar en los medios masivos, siempre y cuando se acomoden a la línea editorial. Siempre digo, el periodista es como el remisero que maneja el auto, pero siempre le dicen a donde tiene que ir. Pero hoy hay  también otras posibilidades con la Ley de Medios, hay más voces y los nuevos periodistas pueden incorporarse a medios con cierta independencia ideológica o crear sus propios medios de comunicación, que  con las nuevas tecnologías es muy fácil. Hay grandes posibilidades de desarrollo profesional. Después, está la grieta…los que están de un lado y del otro, los que dicen que no existe la grieta no entienden nada.

Los periodistas muchas veces nos sobreestimamos, creemos que somos los paladines de la justicia o árbitros de las decisiones políticas. No es así. Hay gente que escucha algo en la radio y dice “esto es así, porque lo dijo tal periodista”, como si fuéramos dueños de la verdad. Tenemos que dedicarnos a contar lo que pasa, y si se puede incomodar. Si tenés buena información la  investigas y lo comunicás, eso tiene una repercusión. Pero si nos convertimos en instrumentos de operaciones económicas y políticas, para posicionar ideológicamente a alguien, somos  operadores no periodistas. Ser periodista es molestar con las historias que uno cuenta. Tenemos que tener un rol activo. Salir de esa postura de que somos las estrellas y la referencia.

-¿Cuál es su opinión sobre el periodismo militante?

-Es una forma de comprometerte ideológicamente a full con una idea. No lo veo mal, es una forma más, lo que pasa que no te podés dejar llevar por una situación  política, cuando sabes que están pasando cosas que no corresponden en tu espacio y no lo decís. Si no difundís cosas que deben conocerse, ya no sos periodista, sos un operador. Por eso es imprescindible, dentro del periodismo militante,  que haya  autocritica, y eso no sucede muy a menudo. Por ejemplo clarín hace partidismo militante; la militancia del lucro, y 678 lo hace para defender al gobierno.

-¿Cuál es su perspectiva a futuro, con respecto a nuestra universidad?

-Veo muy bien posicionada a la universidad, el gran  desafío  es alcanzar la excelencia académica, que tiene que ver con mejorar los rendimientos académicos, estimular a los egresados a que  hagan maestrías y  se especialicen. También estar involucrados a fondo con la política universitaria a nivel regional.



 No oculta su pasión por Racing

Al finalizarla entrevista, el Decano hace honor a sus  años de activar docente, aconsejando: “estudien, no se dejen estar, no copien y peguen, porque si hacen eso los que se joroban son ustedes”. Después de cruzar unos comentarios con respecto al fútbol, lo dejamos en su oficina, con el teléfono insistente. Allí terminó la entrevista pero no el trabajo del Decano, que parece tener una larga mañana de labor académica en su oficina de la Universidad Nacional de Avellaneda.

Nota realizada por: Leila Bitar, Luca Franzi, Christian Quaglia, Daniel Cruz, Enzo Enciso, Iván Marchesin. 


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