Gabriela González, es ingeniera química de formación, oriunda de Caracas, Venezuela, reside en el país desde el año 2010, y en 2015 se unió el staff de Deportistas por la paz, una fundación que busca darle a los jóvenes una visión alternativa de la realidad
La premisa de Deportistas por la paz es la difusión de valores mediante el deporte
Por Carlos Cortés
Por iniciativa del padre Aníbal Filippini, y tras convocar a Melchor Villanueva y Víctor Gutiérrez, en noviembre del 2002 se creó en Villa La Cava un espacio destinado a la realización de “programas de desarrollo humano a través del deporte, con el objetivo de lograr una verdadera transformación social”.
En principio era conocida como “Fundación Desarrollo a través del deporte” para luego pasar a llamarse de manera definitiva, “Deportistas por la paz” cuyo fin es la promoción de valores y la generación de nuevos espacios autogestionados mediante la capacitación de jóvenes y jóvenes-adultos para que repliquen, desde sus vivencias personales, éstas actividades en sus comunidades barriales.
El deporte es la excusa, ya que lo importante es el método que implementan. Este consiste en que “los deportes en equipo se jueguen sin árbitro, se establecen las reglas y después del partido nos sentamos en ronda a hacer la mediación” aclara Gabriela González.
De ésta participa un coordinador que la supervisa y cada equipo realiza un ejercicio de autoevaluación. A través de preguntas el mediador invita a los partícipes a reflexionar; “la idea es que se pregunten como estuvieron ellos en su vínculo como equipo, con el rival y con las reglas del juego”, agrega. ¿Su fin? Promover valores como la honestidad, la responsabilidad o el compañerismo; con esto se busca dejar en claro que “no da ganar a cualquier precio” ya que para Deportistas por la paz “se juega como se vive, lo que hacés en la cancha lo reproducís en la calle”.
A su vez, parte de la metodología de trabajo (y tal vez uno de los pilares de la misma) se basa en la convocatoria de jóvenes que durante el primer año forman parte del proyecto; ya en el segundo “se convocan jóvenes y chicos, y los que ya venían formando parte serán coordinadores del espacio de los niños” comenta la dirigente, que considera ésto algo fundamental.
Hoy en día la fundación lleva adelante varios programas, entre los que se puede hallar el de Fortalecimiento de organizaciones de base, que consiste en brindarle apoyo y capacitación a “líderes deportivos de barrios vulnerados que llevan adelante, a pulmón, un espacio donde se le da contención a los chicos a través del deporte” explica la ingeniera química.
Los mismos pueden ser deportistas o simplemente vecinos del barrio, que según palabras de González, “cuentan con muy pocos recursos económicos, dan lo que pueden, con todo el desafío que implica tener acceso a un espacio público y la dura realidad de los chicos”.
Este programa lo que busca es acompañar a distintos proyectos barriales y trasladar su sistema con el fin de fortalecer tres aspectos: la gestión, la técnica deportiva y las habilidades psicosociales, sobresale ésta última como la más importante ya que según ella el desarrollo humano es el fin, además que “ninguna organización busca jugadores para que los fichen; ellos están ahí para generar un espacio donde el joven esté contenido, se descubra y que más adelante busque hacer de su vida algo positivo que contribuya al resto”.
En la actualidad el plan se lleva a cabo en CABA, Escobar, Pilar, Virreyes, Corrientes, San Juan, Tucumán, Salta y Jujuy.
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